Están diseñadas para garantizar la pureza en descarga de caída libre de productos como granos, azúcar, saborizantes, químicos, minerales, plástico, cosméticos y cualquier polvo. Estas unidades son fácilmente instaladas en tolvas, registros de descargas, gabinetes ya instalados o tuberías.

Cuando el material en caída libre contiene polvo férrico pasa por los tubos magnéticos, el polvo y las impurezas son atraídas y retenidas en la superficie por el efecto del campo magnético. Con esta solución, los equipos e instalaciones estarán protegidos y el producto mantendrá su pureza.

Las parrillas magnéticas están construidas con tubos o cartuchos magnéticos que van fijados a soportes de diversas formas y tamaños. Pueden construirse en formas rectangulares, cuadradas, redondas, ovales, triangulares o de varios niveles para empatar con cualquier medida de descarga. La distancia usada normalmente entre cartucho y cartucho es de 2”.